Campo de trabajo en Albacete

Como cada año, el Equipo de Pastoral Juvenil y Vocacional de la Provincia ha ofrecido la posibilidad de participar, durante el mes de agosto, en un campo de trabajo en Albacete. Campo como saben dedicado fundamentalmente a la marginación: pastoral gitana con niños, jóvenes, ancianos y familias.

Este año han participado los jóvenes de la Etapa de Acogida Adrián Matei y Fabio Losada. El primero desde el día 1 de agosto y el segundo a partir del día 13.

Durante su estancia en nuestra comunidad de Albacete han podido conocer y trabajar en los diferentes ministerios que llevan a cabo los misioneros: parroquias, capellanías, proyectos en que colaboran con las Hijas de la Caridad…

Diariamente la jornada empieza pronto, a las siete de la mañana.

Tras la oración, colaboraban en el Proyecto ALCA (Alternativa a la Calle) de las Hijas de la Caridad. Dicho proyecto, ubicado en el Barrio de la Milagrosa donde trabajan los misioneros y las hermanas, va dirigido a jóvenes a partir de 16 años que han dejado los estudios. En dicho proyecto reciben clases y se les enseña a trabajar el campo. Al concluir el programa del Proyecto se les otorga un diploma que está reconocido.

La labor de Adrián y Fabio ha sido el acompañarlos al campo y trabajar la huerta con ellos.

Por las tardes han asistido a la residencia de ancianos de San Antón, de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados. Los misioneros son capellanes de la residencia. Allí, además de hablar con los ancianos, escucharlos, acompañarlos, tocar la guitarra y cantar con ellos, jugar a las cartas o al parchís, han ayudado a dar las cenas, poner la mesa, fregar, etc.

Algunas tardes, especialmente durante los primeros días de agosto, colaboraron con los misioneros, hermanas y personas del barrio a limpiar y adecentar el “Aula”, edificio del barrio de la Estrella donde se espera, en el futuro, ir realizando distintos proyectos sociales y parroquiales.

Algunos miércoles por la mañana, día de reparto de alimentos para las familias necesitadas del barrio, ayudaban a las voluntarias de AIC a preparaban bolsas de alimentos, ordenar alimentos, etc…

La jornada finalizaba normalmente a las 8 de la tarde con la misa en la parroquia de San Vicente de Paúl.

Los días han sido intensos y no sólo por el calor de agosto sino por la rica experiencia en: la huerta, las calles del barrio, la Residencia de ancianos y nuestras parroquias

Agradecer, a la comunidad de Albacete su apertura y disponibilidad para acoger los jóvenes.

Albacete, 31 de agosto 2012

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