¡Muchas cosas, compañero!
Son las ocho de la tarde (noche). Patio silencioso. Calle silenciosa. Las vecinas gaviotas se esconden en torno a las chimeneas del barrio. Se han retirado las palomas. No hay niños embatados de verde. No hay adolescentes con sus pantalones sajados de cien maneras. ¡Más caros!, por lo que dicen. Y, sin embargo, la vida palpita «al otro lado de la alambrada».
Se va la semana con pena y gloria. También la última lectura: «La ridícula idea de no volver a verte» (Rosa Montero). Por la mañana Capellanía Algorta (8:10); a media mañana Reunión Comunidad (10:30); al mediodía Ruta del Vidrio Barrio (13:00); a media tarde Retiro Bilbao (17:30). Toca escribir un algo que no agonice el día. Vivir el momento más corto, más intenso, más significativo. Ayer noche, con ruta «previa», cayó «como del rayo» un vacuno chuletón. Cortesía (cumple) del siempre ameno, cercano y generoso «Emilín». Tropezamos con Jóse y Javi (pronto acomodado al «julianismo remero»). Venían. Íbamos. Se despidieron. Continuamos.
Semana de ajustes finales de evaluación. Agobios que deben ser cuando no se han tenido en dos meses. Reunión ordinaria y eficiente de la Comisión Pedagógica. Lunes. Misa en REMAR. Hermosa y densa charla en Clara Campoamor (Centro Cultural). Martes. Recomiendo «buscar» (youtube) Miguel Ángel Santos Guerra. Eucaristía y cena en Sestao (La Salle). Miércoles. Mesa de absentismo en el Berritzegune. Vuelta a la Parroquia de San Ignacio. Cantan. Entona Sabina. Cierra la «bajera» Jóse y bajamos hasta el «Txema´s». Nos preguntan por el «resto de Yahvé». Nos hacemos los «suecos». Alguien (que no nosotros) paga. ¡Ya!… José Luis Maturana, creo. Jueves.
Se reintegra, tras Tocinos, Javi Chento. Lunes. Arregla dos ordenadores. Toma un cafecito y mira un ordenador. Martes. Si vienes, hay tarea. Miércoles. Ha llegado un paquete con libros. Jueves: ordenador de la Jefatura de Estudios. Casi finalizada la traducción del volumen 1º de Ozanam. Precisamos socio financiero. Jaime (Corera) pone el texto, Javi las notas y formato. Yo espero aprovecharme. En tanto, sigue muy activo vicencianos.org. Ni un enlace en la promocionada y financiada web oficial de la CM. Acaba el año y recurriremos a los amigos para cubrir gastos. Los enemigos quedan (es de suponer) desconcertados. «No sufras por mí, Argentina» (de argentum).
Se «volatiza» Rogelio al planeta de los «manes» (¡Ale!). Por lo que dicen a «varear la oliva». Pocas noticias (aunque existen). Bien. Se «corporiza» (nunca mejor dicho) el P. Superior. Visto (y fotografiado) en varios y localizables eventos. ¡Tareas previamente conveniadas! En breve, las continuará. Notamos su ausencia. Seguramente le echarán otros en falta sin tardar mucho. Hace un tiempo que no nos acompaña en la comida don Jesús Pereña. Visitas varias al médico. Parece que no demasiado urgentes. Nos olvidamos de la lluvia en esta zona oceánica. «¡Que tiene que llover, tiene que llover, tiene que llover… «.
Buscando y casi sin querer he leído un articulo d mixel olbuenaga. que me ha encantado., MUCHAS COSAS COMPAÑEROS ,de noviembre del 2013 en menos de un folio me hace ver la labor de un días de un paul, con la puntilla al padre superior..Por cierto MIGUEL, y te llamo Miguel pues el con el que te conoci` a mediados de los años sesenta en el noviciado en CUENCA.soy uno de los canarios, que por allí estuvimos. saludos cordiales……………. Carmelo rivero