Segunda Asamblea General de la Corporación en EE.UU. (1973)
Se celebró en Los Angeles, los días 22 a 25 de enero de 1973. Asistieron los padres Herrero, Valcárcel, Villarroya, Dallo, Arribas, Cerro, Echarte, Incera, Irurtia, Lluch, Mateos, Mauleón, Moleres, Esparza.
La reunión dio comienzo, después de breve oración, con la lectura de la carta que el visitador había enviado para esta ocasión.
Se pasó luego a discutir los diversos puntos de la agenda que la Junta de Gobierno de la Corporación había previamente preparado. Se leyeron y comentaron los nn. 337,340,343-345 de los Estatutos de la Provincia de Zaragoza. Se hizo notar que no es más el que vive fuera de nuestras casas que el que vive en ellas. Si hay que respetar a las personas, también hay que respetar los distintos modos de vida y de apostolado. Se insistió en que el n.337 se aplica tanto a los de dentro como a los que viven fuera de las comunidades.
En relación al n.340 se volvió a plantear la cuestión de cómo mejor practicar la pobreza y dar cuentas a la comunidad. El visitador había sugerido que se dieran cuentas cada tres meses y se hiciera el presupuesto individual una vez al año. Admitido el principio de que hay que dar cuentas, se dejó en liberta a los individuos para que escojan la manera más oportuna de hacerlo.
La forma de «convivencia comunitaria» de que habla el número 343 debe ser muy abierta y elástica. No pareció oportuno dar ninguna norma sobre ello. El mero hecho de reunirse y pasar unas horas juntos satisface el espíritu de este número.
En relación al n.344 se habló de nuestra situación en N.Y. Existen dos parroquias encomendadas a nosotros, y cinco padres trabajando con el clero secular. Nuestra disponibilidad supone y aporta un servicio a la diócesis tanto allí como en Los Angeles. Poro se advierte, para evitar malentendidos y abusos, que el paúl que quiera trabajar con el clero secular ofrecerá sus servicios a través de la Corporación, y no abandonará su trabajo sin antes contar con la Corporación.
Se discutió también si convendría establecer casas-residencia de la comunidad, de las cuales so podría salir a servir diariamente a las respectivas parroquias, para volver a dormir y a la vida de comunidad a la noche. Vistos los inconvenientes, se descartó esta idea por ahora, pero se insistió en que sería una solución ideal.
En relación con la parroquia de Pacoima„ Nicolás Herrero, presidente de la Corporación, dio lectura a tres cartas. Una de él mismo al arzobispo de Los Angeles; otra del arzobispo al padre Herrero, y la tercera, del canciller de la diócesis a los consejeros diocesanos. La Corporación ha pedido al arzobispo el estudio de la posibilidad de traslado de nuestra comunidad a otra parroquia donde podamos trabajar con más efectividad. El 60% de los feligreses de la parroquia de Pacoima es de habla inglesa. La asamblea sugiere que en el futuro no se tomen parroquias tan a la ligera. Pacoima nunca debía haber sido aceptada por los nuestros.
Se habló también de nuestras posibilidades en el estado de Colorado y otros lugares, todo esto como una solución de variedad de experiencia para los nuestros. Se sentó el principio de que tener pocas casas es peligroso. A veces un individuo necesita cambio. Por oso se pide al que represente a la Corporación en la próxima reunión del Senado que plantee do nuevo esta cuestión.
Una vez más, este sector de la provincia de Zaragoza pide que dado el número de padres y la importancia de esta labor, el representante enviado por esta Corporación al senado tenga voz activa y pasiva. Pide también la asamblea que se cumpla másseriamente lo que pide el n.352,d, sobre informar al visitador y a todos los miembros de la corporación acerca del estado económico de la misma y de las casas en EE. UU. En cuanto a la letra e) del mismo número, la asamblea decide que cada casa aporte 5& por individuo como complemento del seguro de enfermedad.
En relación al n. 359 la Corporación desea expresar un interés en dar cuantas oportunidades pueda a los padres qué trabajan en España para que los que deseen puedan pasar sus vacaciones veraniegas en USA, sustituyendo a los nuestros en nuestras casas o en las parroquias diocesanas.
Después de otros puntos técnicos relativos al funcionamiento interno de la Corporación, se comentó la carta del visitador leída al principio de la reunión. Como respuesta a las proposiciones de dicha carta se aprobaron por votación secreta los siguientes cambios en los estatutos de la Corporación
Moción 1ª La Junta General Plenaria de la Corporación será convocada cada tres. años (y no cada año, como hasta ahora), y servirá como preparación para la asamblea provincial. A esta junta deberán asistir todos los padres que puedan tanto del Este como del Oeste. Asiste obligatoriamente la Junta do Gobierno.
Moción 2ª: A la Junta General Anual, que se tendrá alternativamente en el Este y en el Oeste, sólo asistirá la Junta do Gobierno, todos los sacerdotes de la zona donde se reúne, más una representación de la otra zona.
Moción 3ª: La Junta de Gobierno se reunirá una sola vez al ario allí donde se celebre la Junta General.
••••000•0 | O • O O • • • • 0 • • • •(Nota del visitador) |
Es un placer observar en esta reunión y en sus conclusiones el verdadero espíritu de subsidiaridad en acción. Efectivamente, nadie más preparado para encontrar y dar forma a la vida de comunidad y al trabajo pastoral en EE.UU. que los que allí viven y trabajan. Por otro lado, hay que observar que algunas de las conclusiones son propiamente materia del Senado, y otras incluso de la Asamblea Provincial. Unas y otras se estudiarán con cuidado lo mismo en la próxima reunión del senado que en la próxima asamblea. Las conclusiones que son de competencia de la Corporación se pondrán en práctica desde este mismo momento.
Tomado del Boletín Provincial de Zaragoza 1973
Comentarios recientes