¡El ciento por uno!
Que nadie se asuste. Lejos de mí emular a los «santones de pureza» (R.Cantalapiedra). Es el caso que me habian comprometido a una «cenita» por no sé qué cumpleaños retrasado. ¡Cochina mentira!… Lo tenía anotado en mi agenda «electrónica». Veo (son las 2:23) que todo ha sido un engaño, una trama excelentemente urdida por varios colectivos. La «cena de cuatro» ha sido de (más o menos) veinte personas. Por lo que me escriben (desde Cruces) una iniciativa del Equipo Directivo, Ampa y Clubes. De todo (?¿) había. Mesa bien; compañía bien; ambiente bien… ¿Se puede pedir mas? Me queda agradecer a los miembros del Equipo Directivo su presencia y cercanía en momentos difíciles (me consta que a punto de solucionarse); a los veteranos miembros de la AMPA (con quienes comparto mantel y amistad desde hace años) y, sobre todo, a los representantes de los Clubes Deportivos (mis queridos Baloncesto Paúles y Pauldarrak). No es mi deseo citar a nadie. Seguramente faltan algunos. Sabed que lo fundamental de la vida comienza ahora. Mis manos siguen abiertas; mi presencia os la garantizo; mis escasos euros son vuestros. Si lo consideráis oportuno…¡contad con ello!… Mil gracias…


San Vicente de Paúl (de ahí el nombre de “misioneros paúles”), a pesar de las comprensibles limitaciones propias del tiempo en el que le tocó vivir (siglo XVII), tuvo un gran aprecio por la comunicación: llegó a escribir más de treinta mil cartas (alguna llegó a su destinatario varios meses después de su muerte). 


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