Convivencia en el Berceau de 1º de ESO del Colegio San Vicente de Paúl Ikastetxea (Barakaldo)
El miércoles, 26 de septiembre, los alumnos de 1º ESO del colegio San Vicente de Paúl de Barakaldo, acompañados de sus tutores: Ángel Hernández y José Luis Rojo; del P. Corpus y de la coordinadora de pastoral: Begoña Gorostiaga, compartimos un día de convivencia en un lugar muy especial: Berceau de Saint Vincent de Paúl.
Alrededor de las 8:30 h, después de despedirnos de los aitas, amas y abuelos, que habían acompañado a sus hijos a la parada de autobús, partimos hacia nuestro destino con ilusión.
Nuestra primera parada fue en el área de Labenne, para tomar un pequeño almuerzo. Compartimos, en grupos, lo traído de casa, en un ambiente estupendo y con un sol radiante, que nos acompañó todo el día.
Sobre las 11:30 h., llegamos a nuestro destino esperado: Berceau de Saint Vincent de Paul.
Reunidos todos frente a la capilla, con el P. Corpus, realizamos una visita guiada interesante para situarnos en el lugar.
Nos explicó el lugar del nacimiento de San Vicente, llamado Ranquines, cuya casa actual es típicamente landesa, con su entramado de madera a la vista: una casa llamativa, que los alumnos disfrutaron, recorriendo todas sus estancias.
La encina, aunque probablemente sea un roble: símbolo de fortaleza, serena, vivaz. Se ha demostrado, que es milenaria, por lo que, estamos seguros, que el joven Vicente tuvo que arrimarse a ella, cobijándose en su sombra.
La capilla, un edificio precioso en cuyo frontispicio se leen las palabras “Quis putas puer iste erit” ¿que llegará a ser este niño?, expresión de admiración del evangelio que aquí, hace referencia, a Vicente de Paul.
En los alrededores, nos encontramos con distintos edificios que se construyeron para perpetuar el recuerdo de San Vicente de Paul: residencias de ancianos, colegios, comunidad de Misioneros e Hijas de la Caridad; en definitiva, la obra del Berceau.
Situados ya en el lugar, comenzamos a trabajar en grupos, para conocer, in situ, los pequeños detalles de la vida de nuestro santo y porqué llegó a ser tan querido en el s. XVII.
Todos los alumnos, con la ayuda de un pequeño cuadernillo: “La revolución de una mirada”; han profundizado en la intensa labor de San Vicente. Personalmente, también, se les invitaba a ver cómo es nuestra mirada; a mirar a través del corazón, para poder llegar al encuentro con los demás.
Finalizamos con una Eucaristía en la Iglesia, donde celebramos, de víspera, la fiesta de San Vicente. Un lujo poder celebrar nuestra eucaristía de principio de curso en este lugar tan emblemático para nosotros, alumnos vicencianos.
Después de una foto de grupo en las escalinatas de la iglesia, nos dirigimos a la parroquia donde fue bautizado San Vicente, que conserva la pila bautismal de la iglesia primitiva y tiene unas hermosas vidrieras con escenas de su vida.
Los alumnos tenían que seleccionar, por grupos, cinco vidrieras para elaborar una presentación en ppt, explicando los diferentes momentos de su vida. Esta actividad, además de servir como trabajo para la asignatura de religión, se publicará en la web del colegio, con lo cual, los alumnos, con rapidez, se dispusieron a fotografiar todas las vidrieras que les asignaron.
Y así, finalizamos las actividades previstas para este día de convivencia de inicio de curso.
A continuación, nos dirigimos a comer en el Lac de la Glaciere, un área de arbolado junto a un lago. Allí descansamos mientras compartíamos los bocatas, dulces, bebida… en un buen ambiente, muy apropiado para conocer y acoger, a los alumnos que empezaban este curso en el colegio.
Nuestra próxima parada Dax, villa romana célebre por sus aguas termales. Nada más bajar del autobús, hemos visto las murallas que rodeaban la ciudad, y el edificio de correos, donde existió un internado al que asistió Vicente, mientras cursó sus estudios.
Nos hemos acercado también, a la Fontaine Chaude, fuente de aguas termales, que llamó mucho la atención de todos los alumnos: un agua muy caliente para un día muy caluroso. Acabamos la visita de esta ciudad, viendo los restos arqueológicos de la cuidad más antigua.
Hacia las 5h de la tarde, nos dirigimos hacia nuestro último destino, la playa de Hossegor, una bonita playa con unas dunas impresionantes, dónde disfrutaron de un baño y merendaron, antes de emprender el viaje de vuelta.
Llegamos a Barakaldo con cierto retraso, pero muy contentos, después de un día intenso.
Un día que nos ha acercado a San Vicente de Paúl, viendo su casa, su parroquia, su colegio, la ciudad donde estudió…
Un día donde hemos convivido todos juntos, compartiendo actividades, canciones, momentos divertidos…
Un día que recordaremos siempre con cariño, un estupendo inicio de curso, una convivencia muy entrañable: convivencia en el Berceau.
Begoña Gorostiaga
Coordinadora de Pastoral
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