Retiro de catequistas en el tiempo de Cuaresma – Honduras
Con motivo de este tiempo de Cuaresma las catequistas de la parroquia Santiago Apóstol de Cuyamel el día 8 de marzo tuvieron el retiro de este año 2025.
Cada segundo sábado de mes aprovechamos para tener la formación mensual, pero en este tiempo de marzo aprovechando el inicio de la cuaresma tuvimos el retiro de los catequistas.
Para las 8.30 ya se habían acercado un buen número de catequistas para tener un momento de tranquilidad para comenzar una jornada muy importante a nivel espiritual. Comenzábamos a las 9.00 de la mañana con un pequeño refrigerio.
El tiempo de la cuaresma es una preparación para la Pascua. Es un regalo que Dios nos hace. De la misma manera que acompañó al pueblo de Israel también nos acompaña a los catequistas de la parroquia Santiago Apóstol de Cuyamel en este tiempo tan especial.
En este tiempo tenemos la oportunidad de descubrir como Dios se hace presente en nuestra vida. Como nos acompaña en nuestras alegrías y en nuestras tristezas no dejándonos nunca de la mano. La conversión es uno de los pilares de este tiempo de la cuaresma. Nos conocemos muy bien. Sabemos de nuestras virtudes pero también de nuestros defectos. Siempre hay y tenemos la oportunidad de cambiar las cosas si queremos. Para ello tenemos que tener la fuerza de Dios para poder superar las adversidades y seguir hacia adelante con la cabeza bien alta. Hay que mirar en nuestros corazones para cambiar lo que nos deja intranquilos. Todo ello pidiendo la fuerza para hacer las cosas bien. A nuestro alrededor tenemos personas que nos ayudan a no perder el norte de nuestras vidas y eso es algo que tenemos que agradecer.
La segunda de las claves tiene que ver con nuestra generosidad, querer compartir los bienes con los más necesitados, la solidaridad. A ejemplo de San Vicente vivir la generosidad y la solidaridad. Siendo empáticos a modo de Jesucristo con los más necesitados. Teniendo un amor afectivo y efectivo. Algo que nos nace en nuestro corazón, en nuestro ADN vicentino. Un amor efectivo porque se traduce en una urgencia, en un llamado para atender a los más pobres, a los más necesitados, a los que no cuentan o están excluidos.
Como catequistas vicentinos tenemos que estar asentados en la oración, otra de las claves de este tiempo y de cualquier bautizado ya que sin ella no podríamos hacer nada y nuestras vidas no tendrían ninguna razón de ser. Orar es hablar con Dios, contarle las cosas que nos pasan, aunque no lo expresemos con palabras, solo desde el corazón. La oración nos ayuda a hablar con el amigo que nos escucha y nos acompaña en nuestro recorrido diario. Asi es Dios con nosotros que sin esperar nada a cambio nos acompaña en nuestro caminar. A lo largo del día tenemos muchos momentos en los que podemos hablar con Dios y hay que aprovecharlos, saborearlos. Porque la oración es el motor, la gasolina para el carro. Sin ella no podríamos hacer las cosas que hacemos.
El ayuno es otra de las características de este tiempo de cuaresma. No solo por la comida. Hay otra clase de ayunos que nos pueden ayudar a vivir el tiempo de la cuaresma, el Papa Francisco, nos invita a ayunar del: celular, hablar mal de las personas, Condenar, Juzgar
Hay otras actitudes que podríamos tener en cuenta para este tiempo de conversión, para quitar o superar: soberbia, acepción de personas, indiferencia, impuntualidad, desesperanza, a apatía, la desconfianza
Otro de los aspectos de este tiempo es el regalo que Dios nos hace en el sacramento de la Reconciliación. Es muy importante saber que nos podemos equivocar. Que a veces tenemos actitudes no muy buenas ni saludables con el que dar testimonio en nuestra vida diaria: familia, trabajos, estudios, pastorals, comunidad, vecinos. Saber rectificar es de sabios. Saber pedir perdón y ser perdonados son uno de los mayores regalos que pudiéramos tener o recibir. Saber reconocer nuestras imperfecciones, nuestros fallos o caídas nos acercan a que seamos mejores personas con nuestras palabras y nuestras acciones.
Este año con motivo del Jubileo tenemos una oportunidad extra para acercarnos al sacramento de la Reconciliación.
Cada Viernes como comunidad tenemos un espacio para acompañar a Jesus por medio del Viacrucis (Pasion y Muerte) en todas las celebraciones que se realizan en nuestra parroquia.
Para finalizar el retiro los catequistas tuvieron la oportunidad de reflexionar algunos textos tanto del AT como NT. Con unas preguntas y con un propósito o algo a tener presente para vivir de una manera mejor la Cuaresma. Y con los avisos, entrega de los libros de la catequesis a los que habían pedido el material, bendición de los alimentos terminaba una jornada muy intensa de oración, estudio y reflexión.
Félix Mariezkurrena, C.M.
Comentarios recientes