Encuentro de los Consejos Provinciales de las Hijas de la Caridad en Sevilla

Siguiendo el ritmo del 10º Encuentro celebrado en Ávila en febrero de 2016, y en cuanto lo permitieron los diferentes problemas de la Pandemia, se celebró en Sevilla, el 11º Encuentro de Consejos Provinciales, de las Hijas de la Caridad de España, del 31 al 3 de noviembre de 2022, con el título: “Abriendo puertas a nuevos horizontes”. 

La última Asamblea general, bajo el lema EPHATA (Franquear la puerta… Ir hacia… Encontrarse), en su documento Interasambleas (D.I.A.) deja claro que la Compañía no quiere vivir encerrada, que quiere franquear las puertas necesarias para seguir respondiendo a la voluntad de Dios sobre ella en este momento decisivo e histórico. 

Los Consejos de las provincias de Hijas de la Caridad de España se han planteado que quieren abrir la puerta a nuevos horizontes, siendo conscientes de dónde están y mirando hacia un mismo punto, dirigiendo los pasos hacia un espacio, un tiempo y un lugar a los que quizás algunas Hermanas no llegarán, pero con la certeza de que la Compañía sí lo hará.

Por todo ello se atreven a seguir traspasando la puerta del amor a la humanidad como lo han hecho todas las que nos han precedido y, divisando el horizonte, marcar grandes metas, aspirar lo mejor, dedicar tiempo, discernir unidas, avanzar en el camino y pararse a contemplar, teniendo al Espíritu Santo como guía de todas sus acciones.

Fueron días en los que se habló de futuro, de acompañamiento y de organización. Se abrieron las puertas de la mente y el corazón a otras visiones y voces que les ayudan y ayudarán a profundizar en todos los aspectos del Documento Inter-Asambleas. 

 Estos son algunos de sus SUEÑOS:

Soñamos:

• Una Compañía en España más pequeña, más ágil, disponible, con capacidad de movilidad y cercana a los pobres, como «pequeño resto» que mantiene viva la llama del carisma y pasa el relevo a las siguientes generaciones.
• Con Comunidades abiertas, que irradien felicidad y alegría, que caminen acompasando el proceso con paciencia y esperanza, acogiendo y escuchando.
• Soñamos con un cambio de mentalidad en nuestras Comunidades y Hermanas que camine hacia la construcción del Reino desde la fortaleza vocacional de la pirámide invertida, para hacer una lectura de la Vida con mayúscula.
• Con Comunidades que reconocen el carisma como un regalo de Dios a la Iglesia y por eso lo comparten con sus colaboradores laicos de tal manera que se asegure su vitalidad y pervivencia avanzando en la misión compartida.
• Con una Pastoral conjunta de 
• Finalmente, con una presencia alternativa siendo levadura en la masa.

Julian Arana, C.M.