XVI Asamblea Provincial (23 de junio: Día 2º)
Cosa rara. La mañana ha amanecido fresquita. Tanto que algunos pajaruelos asambleistas han visitado a las claras el breval de la casa y le han dado unos buenos meneos. A estas horas ni quedan rastros para los gorriones del campo. Nos queda el consuelo de los albérchigos. Este huerto da para más de lo que parece. Dispersos por aquí y por allá se ve un granado, dos cerezos y un membrillo. No cataremos nada a no ser que la asamblea vaya más allá de los sanfermines. Poco que temer teniendo en cuenta que la mayoría (en este caso relativa) de los representantes son navarros y la proximidad de los sanfermines es una línea infranqueable.
Bien a punto iniciamos el día con el rezo de Laudes y un rato de oración. Desayuno «tradicional» (huevos, panceta, txistorra) aunque las «saludes» comienzan a requerir (no hay más remedio) desgrasados, desnatados, desazucarados… ¡Tanto cuerpo y sin cabeza! Con todo… no queda nada. Con todo… bajamos al salón de los plenos que, como ya es conocido, está en el sótano de la casa. Por cierto con la WIFI recién estrenada y el aire acondicinado funcionando correctamente. ¡Pobre garganta mía!
Se fue la mañana con la presentación, discusión y aprobación (en su caso) del Documento remitido por la Comisión Preparatoria de la Asamblea General. El trabajo de cada una de las Comunidades fue bueno y la síntesis realizada por nuestra Provincial Comisión, también. Así que la cosa fue ligerita aunque nos pasamos media mañana levantando y bajando los brazos para mostar su aceptación o rechazo. Si la mayoría nos limitamos al levantamiento de brazo, no fue similar lo realizado por el Secretario asistente por cuanto hubo de levantarse exactamente veinte veces a contar y recontar las votaciones. Es lo malo de esta encomienda.
La segunda parte de la mañana se ocupó (en primera instancia) en la presentación del trabajo que realizaron en su momento las diferentes comisiones nombradas por el Visitador con vistas a la reconfiguración interna de la Provincia. Sin prisa pero sin pausa lo fueron haciendo los correspondientes responsables: Misiones Populares, Honduras, Parroquias, Formación, Colegios, Estados Unidos, Familia Vicenciana… Nos llevó hasta media tarde. Obviamente hubo tiempo para la comida, el paseo y el descanso. Terminamos este trabajo a las cinco, aprobando previamente el Directorio.
Tuvimos un receso extraordinario ya que correspondía a la Comisión Central enfocar la forma de trabajar con la valiosa información recibida. Se aprobó realizarlo en siete comisiones de diferente composición. Su misión no es otra que revisar en profundidad la Líneas Operativas y redactar unas nuevas Orientaciones (se llamen como se llamen) sencillas, concretas y evaluables para los próximos tres años. En esta incipiente tarea estuvimos entretenidos hasta las 19:30. Un breve descanso dio fin al trabajo. A las 20:15 estábamos en la capilla para rezar Vísperas y celebrar la Eucaristía. Presidiola el P. Felipe García (en la celebración de sus 42 años de ordenación sacerdotal en la entonces capilla del Carmen de Barakaldo, junto a su amigo del alma Julián Arana). Con su desparpajo habitual glosó algunos de sus momentos de gloria, recordando a quienes le mostraron el camino.
Pasó una mañana. Pasó una tarde. Día 2º de esta XVI Asamblea Provincial de Zaragoza.
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