Ejercicios Etapa de Acogida de Zaragoza
RETIRO ESPIRITUAL DE SEMANA SANTA 2017
Con el deseo de encontrarnos con Cristo y de prepararnos en esta Semana Santa, iniciamos el retiro espiritual con un viaje de dos horas, en el cual pudimos disfrutar de los distintos paisajes que nos ofrece la tierra de Navarra, colinas verdes y arboles con flores dignos de la primavera. Al llegar a nuestro destino, Pamplona, inmediatamente avistamos una imponente estructura que está bajo el manto y los rayos de luz de nuestra Madre “La Virgen Milagrosa”; era para nuestro asombro la Iglesia y al mismo tiempo la casa donde estaríamos haciendo los ejercicios espirituales.
Al llegar a la Iglesia nos esperaba en la entrada el P. Carmelo Velloso, quien nos guiaría en estos días, nos recibió con alegría y humildad; entre sonrisas y expectativas nos presentamos y empezó nuestro recorrido. Primero visitamos en el templo, espacioso y tranquilo, donde otro sacerdote daba la comunión a los fieles. Luego fuimos conociendo cada espacio de la casa y algunos de los misioneros de la comunidad (al menos a unos pocos). De inmediato nos llenaron de historia y hasta un poco de inglés nos hicieron hablar. La casa es tan grande que casi se necesita un mapa para recorrerla, pero lo más importante es que cada espacio está bien aprovechado, en distintas actividades religiosas, caritativas, educación y sociales.
Ya en horas de la noche, luego de un encuentro personal con Cristo en el Santísimo Sacramento, y de un recorrido por la ciudad, el P. Carmelo nos dio la primera charla-reflexión. Esta fue en medio de una plaza pública llena de jóvenes y adultos que disfrutaban de los espacios. Aprovechando el momento, salió del Padre un interrogante que capturo nuestra atención ¿Cómo vamos hacer para llevar el mensaje de Dios a cada una de esas personas? Casi sin darnos cuenta entrábamos en materia espiritual, desde la realidad y frente a todos aquellos que esperan por nosotros.
El día siguiente lo iniciamos con el rezo de Laudes, el desayuno y luego el P. Carmelo nos compartió la reflexión de la mañana que trataba de la importancia de vivir la “densidad del silencio” como vía para encontrarnos y escuchar lo que Dios quiere para nosotros, a ejemplo de María la Madre de Jesús, y también de nuestro fundador San Vicente de Paul en algunos momentos específicos de su vida. Durante la tarde la charla giró en torno a una interrogante del Evangelio, ¿Quién dice la gente…? (Mt 16, 13-20), y la importancia de la respuesta de Pedro “Tu eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo” (Mt 16, 16). Al terminar las charlas era nuestro deber poner en práctica lo aprendido, mientras reflexionamos con diferentes textos del Evangelio y las distintas interrogantes que nos iban surgiedo. Todo esto mientras se guardaba el silencio propio de los ejercicios espiríteles.
El tercer día fue el Domingo de Ramos. Luego del rezo de Laudes, el P. Carmelo inicio la charla que trato sobre “La Transfiguración de Jesús” (Lc 9, 28-36), para reflexionar sobre la actitud que tomaron Pedro, Santiago y Juan durante el acontecimiento. Posteriormente era nuestro deber ayudar en los preparativos de la Celebración Eucarística y demás actos litúrgicos. A media mañana con la bendición de los Ramos entramos en procesión hasta la Iglesia que estaba llena de fieles con sus ramos en las manos, esperando que iniciara la eucaristía.
Durante la tarde nuestra reflexión fue sobre la “Voluntad de Dios y la Providencia” tomando como texto guía (Mt 6, 24-34), para responder con sinceridad ¿Quién o que ocupa el primer lugar en nuestra vida?
En el cuarto y último día de nuestros ejercicios el P. Carmelo Velloso ha quiso, a través de la parábola del fariseo y del publicano (Lc 18, 1-14), darnos herramientas para aprender hablar con Dios, para orar y reconocer si estamos haciendo de Él la base de nuestra seguridad, en todos los aspectos de nuestra vida y sobre todo en la vocación al sacerdocio. Para ello, así como lo hizo en las anteriores charlas, nos entregó material de apoyo que sin duda había pasado días preparándolo, ya que tenía todo lo necesario para hacer más sencillas y efectivas nuestras reflexiones.
Los ejercicios los concluimos llenos de tranquilidad y con mucha más alegría, con la celebración de la eucaristía y un aporte personal de lo que significó para cada uno de nosotros, estos cuatro días de encuentro personal con Cristo.
Debo acotar que no todo fue oración y silencio absoluto, sino también, compartir fraterno reflejado y vivido durante los videos de reflexión, la comida (que fue sin duda muy buena), las caminatas de ratos libres por la ciudad, en el encuentro con diferentes personas y misioneros de la casa y sobre todo en las conversaciones que teníamos con el Santísimo Sacramento que permaneció cerca de nosotros, en una capilla pequeña, pero cómoda, justo frente a nuestras habitaciones.
Finalmente quiero agradecer de manera muy especial al P. Carmelo Vellos, y a toda la Comunidad de los Padres Paules de Pamplona, por su atención, acogida y esmero en preparar para nosotros en estos ejercicios espirituales, y por todo lo aprendido.
Que Dios y La Virgen Milagrosa los bendigan y acompañen siempre.
José Leonardo Bastidas
Etapa de Acogida – Zaragoza
¡Que alegria!, de ver a los cuatro compañeros de la Etapa de Acogida. Mucho ánimo en vuestro discernimiento. Un abrazo
Gracias Aarón, un abrazo hermano.
La alegría del evangelio está presente entre tanto bueno. Esperanza e ilusión entre vosotros. Salud y misión a todos.
Me encanto ver al padre Carmelo. El hace una hermosa labor aquí en Honduras y actualmente está en su patria en tratamiento médico. Lo extrañamos.