Retiro de la Etapa de Acogida

ZARAGOZA, 27 Y 28  DE FEBERO

  

El fin de semana (27 y 28 de Febrero) los dos jóvenes de la Etapa de Acogida en Casablanca hemos hecho un alto en el camino para profundizar en la reflexión sobre nuestro ser cristiano y vocacional. Todos los días participamos con la comunidad de los misioneros en la oración y en la Eucaristía, pero necesitamos estos días más intensos para cargar las pilas, que tanto se desgastan con las clases, los estudios, los exámenes y la rutina de los días.

Nos acompañó en la reflexión el P. Chema Ibero, párroco en San Vicente de Paúl de Cartagena y con mucha experiencia misionera tanto en Honduras como en el Equipo Provincial de Misiones. Su estilo sencillo y cercano nos agradó desde el primer momento, y la buena preparación de las oraciones, las charlas y las celebraciones nos ayudaron mucho.

Empezó diciéndonos que se trataba de aprovechar estas jornadas para conocer mejor al Pastor, Jesucristo. Y se centró a continuación en el tema de las llamadas para seguir a Jesús, centrándose en el texto de Jn 1,35-39 (¿qué buscáis?) y en el de Mc 1,16-20 (llamada personal y compartida) Se nos invitó a centrarnos en el valor de las miradas de Jesús, mirada que descubrimos convocadora, profunda, exigente, compasiva, motivadora, sanadora… Fue toda una sacudida a nuestra inquietud vocacional.

El tema de la tarde del sábado nos situó ante el seguimiento de Jesucristo desde la óptica de San Vicente de Paúl. Fuimos recorriendo con el P. Chema personas y lugares vicencianos: la señora de Gondi, las mujeres de Chatillon, santa Luisa, Margarita Naseau… Folléville, Paris… Y fuimos concentrándonos en el hilo conductor de todos esos nombres: el deseo de servir y evangelizar a los pobres.

Ya el domingo, y después de la oración de la mañana y el desayuno, volvimos a reunirnos para la tercera reflexión, que trataba de la evangelización de los pobres. Desde la realidad de los pobres y del Evangelio, nos detuvimos en qué es evangelizar, cómo puede hacerse, desde qué actitudes, etc. Fue un compartir muy enriquecedor ya que nos aportó buena parte de lo esencial de la vocación del misionero paúl.

Redondeamos la jornada de retiro con las celebraciones de la Eucaristía. La del domingo la celebramos en la parroquia, a las 13,00 horas, junto con los fieles y los dos grupos de jóvenes que se preparan para la Confirmación. Fue una Misa muy viva y participada en la que el P. Chema nos recordó que la llamada a la conversión implica adentrarse con más ilusión en el seguimiento de Cristo. Ahora ya nos queda avanzar en los estudios durante estas semanas para terminar el Trimestre con Ejercicios Espirituales en Pamplona, y desde allí salir para Las Palmas y Tenerife, donde celebraremos la Semana Santa y pasaremos unos días con nuestras familias.

Samuel Hernández y Brandon A. Torres
(ETAPA DE ACOGIDA)