Día de excursión con destino Valencia del Seminario Interno en Teruel

El día 14 de diciembre de 2012 el Seminario al completo realizamos nuestra excursión comunitaria mensual, con destino a una de las más espléndidas ciudades de España, Valencia. Con una población de aproximadamente 810.000 habitantes y una superficie de 134,65 km², Valencia es la tercera ciudad más grande de España. La mezcla de lo antiguo, lo histórico, lo cultural y lo moderno hace de Valencia una ciudad encantadora, que anualmente atrae más de 5 millones de turistas.

El sol nos acompañó prácticamente todo el día. En la primera parte del día, Isaac, natural de la ciudad, nos la presentó. Obviamente, como la ciudad es tan grande y tiene tanta cultura y tantos sitios para visitar, no nos dio tiempo para verlo todo, pero pudimos descubrir lo más interesante y hermoso. Así que nuestro recorrido nos permitió conocer la Catedral-Basílica de Valencia y su entorno. Dedicada a la Asunción de Nuestra Señora, la Catedral-Basílica de Valencia, reúne en el Altar Mayor, aparte de la bóveda espléndida con la representación de ángeles tocando instrumentos musicales (del año 1474), el Retablo Mayor en forma de armario con las grandes puertas al estilo renacentista de Italia, pintado por Fernando Yáñez de la Almedina y Hernando de los Llanos, colaboradores de Leonardo da Vinci. Este Retablo habría sido pintado entre 1506 y 1510 y traído por sus autores hasta Valencia, de donde se expandió este estilo por toda la Península Ibérica.

En la Catedral se encuentra uno de los objetos más valiosos para la historia de todos los cristianos del mundo, el “Santo Cáliz”, el mismo de donde bebió Jesús en la “Última Cena” junto a sus apóstoles. En 1744 el Cáliz se le cayó a un religioso en el suelo y se agrietó. Por esta razón lo que se conserva del Santo Cáliz es propiamente la copa, de piedra de tipo ágata oriental o calcedonia, de color rojo oscuro y datada en el siglo I d.C. El pie de la copa está constituido por una navecilla, en posición invertida, ribeteada en oro, en la que se han encastrado valiosas perlas y esmeraldas. Toda esta estructura del Santo Cáliz se remonta a la Edad Media.

Seguimos nuestro recorrido visitando la casa natal de San Vicente Ferrer, patrono de la ciudad, cuya fiesta celebramos el 5 de abril, día de su fallecimiento en Vannes (Francia). Un hermano de la comunidad de los Dominicos nos hizo un recorrido de la vida del Santo a partir de las cerámicas de Manises que se conservan en la entrada del “pouet”: el nacimiento, la infancia, los milagros, etc.

Al final de la mañana, la Comunidad misionera de Valencia nos acogió con los brazos abiertos para compartir una mesa copiosa donde no podía faltar el plato típico, la paella, para concluir con una delicioso postre, hecho por la madre de Isaac, y unas suculentas naranjas, que son consideradas las mejores de España. El superior de la comunidad, P. Pedro Gómez, nos contó la historia de la presencia de la Congregación en Valencia, que fue completada con los testimonios de las actividades pastorales del P. Humberto y del P. Javier Serra y la visita a la parroquia de la “Mare de Déu de Montolivet”.

Después de este momento compartido, salimos a dar un paseo por la “Ciudad de las Artes y las Ciencias“, situada al final del viejo cauce del rio Turia. Este lugar es un gran complejo lúdico-cultural de la ciudad de Valencia, que se ha convertido en referencia internacional. De hecho, la “Ciudad” constituye hoy el mayor reclamo turístico de la ciudad, ganadora en el año 2007 del concurso “12 Tesoros de España”.

Concluimos la jornada con una merienda-cena en compañía de los señores Juan y Mª Ángeles, padres de Isaac. Volvimos a casa con una chispa de alegría y con el deseo de volver un día para seguir descubriendo los misterios de esta encantadora ciudad de Valencia.

Teruel, 15 de diciembre de 2012
Adrián Matei, seminarista