Feria en la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús, Puerto Cortés (Honduras)

LA FERIA PARROQUIAL EN PUERTO CORTÉS – HONDURAS

El pasado domingo 10 de junio, la parroquia Sagrado Corazón de Jesús celebró su fiesta patronal, la feria parroquial, en honor al Sagrado Corazón de Jesús. Desde días antes, la comisión preparatoria estuvo trabajando a destajo para que nada se les escapara de las manos y todo saliera redondo.

Este año, la feria tenía un especial toque ecológico, en consonancia con las orientaciones de los obispos de Honduras para este año. Con este motivo se lanzó desde semanas antes, la campaña triple R (Reduce, Reutiliza, Recicla), y se establecieron lugares de recogida de plásticos en los distintos sectores de la parroquia. Este pequeño proyecto se hizo en colaboración con la empresa Recyproco, que se dedica al reciclaje de plásticos. Lo cierto es que en estos lugares el sistema de recogida de basuras es muy limitado, lo que hace que, aunque haya empresas que se dediquen al reciclaje, la cantidad de residuos que se reciclan sea muy poca. Por eso, esta campaña tenía la función de sensibilizar y llamar la atención de las autoridades. También el tono ecológico se notó en que el vivero municipal de Puerto Cortes tuvo su espacio, donde los parroquianos pudieron adquirir diferentes especies de plantas. Asimismo, se realizó un taller sobre cómo embellecer casas y jardines de forma natural. Los premios de los distintos concursos fueron igualmente plantas para jardín, y a cada comunidad se le regalaron unos cubos de basura para poder diferenciar los residuos.

El acto central del día fue la Eucaristía, presidida por monseñor Don Ángel Garachana, Obispo de San Pedro Sula, a quien agradecemos su presencia en esta ocasión. Su homilía, sobre las lecturas del domingo, se centró en tres ideas. La primera fue recordar la existencia del mal y el pecado, pero afirmar que Jesucristo ha vencido al mal, y, con su ayuda, nosotros también podemos ir venciendo al mal. Nos invitó así a ser una parroquia liberada y liberadora del mal. La segunda idea se refería a la identidad y la pertenencia. Jesús genera una pertenencia mucho más fuerte que los lazos de sangre, o que la afiliación a un partido; es la pertenencia a su iglesia, que nos hace ser una única familia. Esos son los lazos de pertenencia más fuertes (“este es mi hermano y mi hermana, el que cumple la voluntad de mi padre”). La tercera idea, inspirada en la segunda lectura (“creí, por eso hablé”), nos invitaba a no quedarnos callados y a no guardarnos para nosotros el evangelio. Refiriéndose a los animadores de Comunidades Eclesiales de Base, que poco más tarde serían enviados, sentenció que no los enviaba para callar, sino para hablar, hablar de las maravillas de Dios y del evangelio de Jesús. Las comunidades eclesiales de base (CEB’s) tuvieron un protagonismo especial en esta Eucaristía. Entraron en procesión, cada una con pancarta, y tras la homilía de monseñor fueron enviados los animadores de cada comunidad.

Tras la Eucaristía, la animación se prolongó hasta entrada la tarde. En el escenario hubo actuaciones de distintos grupos de la parroquia: los niños del hogar, el grupo garífuna de Travesía, los coros de las comunidades de Jalisco, la Concordia, Nuevos Horizontes y La Venada, el cuadro municipal de danzas folclóricas, etc. También hubo algunos juegos para los más pequeños, y la participación de un mago. No faltaron los puestos de comida, preparados por algunos feligreses, para no pasar hambre durante la fiesta. El patio del colegio Sagrado Corazón de Jesús se convirtió en una galería de arte, con presencia de algunos reconocidos artistas porteños, y la exposición de los dibujos que los niños presentaron al concurso de dibujo. El deporte también estuvo presente; en una calle lateral se jugó la final del futbolito parroquial, organizado por la pastoral juvenil. La comunidad de Delicias superó a Medina y se alzó con el triunfo.

Todo el evento estuvo retransmitido por Radio Luz Cortés. Al final de la jornada, el P. Mikel Sagastagoitia hizo entrega de los premios a los ganadores de los concursos de dibujo y fotografía, así como al equipo campeón del futbolito. Asimismo, dio las gracias a todos los participantes por su presencia y su alegría.

La lluvia intermitente no fue obstáculo para que todos pasaran un día extraordinario de alegría y convivencia, en honor al Sagrado Corazón de Jesús, celebrando que somos parroquia, es decir, familia.

Iván Juarros, C.M.