Reunión de Superiores (locales)

Asisto a la misma por «imperativo legal» (ausencia justificada del Superior de Barakaldo). Escribo estas líneas «motu propio» (mi cuenta bancaria aspira a seguir creciendo). He llegado a casa tras las pertinentes cuatro horas de autobús. La «roja» sonroja (por lo que me dicen los profesionales). Sobre mi mesa cincuenta folios dobles que exigen corrección para mañana («El Manifiesto de los Persas»); en la plataforma EDUCAMOS otros tantos de ÉTICA… Me dicen que las ausencias no se han notado… Ayer éramos diez y mañana once: daremos la bienvenida a Luis Moleres.

Vayamos al tema. La convocatoria de «Superiores» era para los días 8 y 9. Zaragoza-Casablanca. Al anochecer del 7 estamos los posibles. Faltan los americanos. Barakaldo y La Orotava envían sustitutos. Con las Laudes y Oración se inicia el primero de los días. Son las 8:30. Anima la oración el P. Paulino (¡no se pierde una!) y pone el ritmo musical el P. Arana (quiero suponer que también es el autor del tradicional cuadernillo; quiero suponer porque sé de las habilidades en este quehacer del P. Visitador). El desayuno (atrayente para la vista, motivante para el gusto, preocupante para la salud) cierra el preámbulo mañanero.

A las diez estábamos rememorando tiempos estudiantiles. Carpeta y boli (¡fino!) en cada una de las mesas. Nos acoge la tradicional sala de reuniones. El P. Visitador nos presenta al «otrora» llamado «ponente» y en nuestros días «animador» o «coach» de la Jornada: el P. Fernando Quintano, superior de la casa de Burgos. El tema: «Identidad y Pertenencia». Profundidad, saber decir y mostrar emoción en sus dos intervenciones de la mañana. Breve diálogo (¡habrá tiempo!). Me alegró su dicción. Algunos detalles están en www.vicencianos. Fuese la mañana con rapidez, dulcificada con un breve descanso (bandejita de huevos, txistorra, etc….). Comida a las 13:45. Descanso posterior aprovechado para el paseo, charla distendida o planchado de oreja. Por aquello de evitar el entone del «gori-gori» se nos repartió, previamente, un «dossier» que debía servir de base para la última sesión de la tarde. Varios y diversos textos con unas preguntas-provocación. A las 18:30 estábamos dispuestos para el debate. Un debate que resultó rico y, en momentos, profundo. Tan es así que, como cierre, quedó un más que significativo interrogante ¿no es posible hacer esto en nuestras comunidades? Sin descanso, pasamos a la capilla. Vísperas y Eucaristía. ¡Enséñanos a orar!… Con el «gozo en el alma» terminamos las formalidades en el comedor. La tertulia posterior llegó, por lo que dicen, hasta el Pilar. Algunos no menos fieles quedamos con «vaso alto» en la misma casa.

Son, como ayer, las 8:30. Laudes y Eucaristía. La preside el sr. Visitador. Desayuno bis. A las diez en la sala estés. Breve intervención del administrador Provincial que desgrana algunos detalles del área que le atañe acompañada de algunas aclaraciones. Media hora. El resto de esta sesión la ocupan algunas informaciones del P. Visitador que es de suponer aparezcan en el Boletín Provincial. La segunda de las sesiones, previo descanso, se la lleva un difuso y desorganizado «informe» de cada uno de los presentes acerca de sus comunidades. ¡Es lo que hay! Finaliza la Jornada el propio Visitador con algunas «recomendaciones» para cada uno de los presentes. Estamos en el comedor a las 13:45. A partir de ahí «cada mochuelo» a su olivo. En el ínterim…las fotos de rigor.